A VISTA DE PÁJARO…MUERTO
“Durante la última década han fallecido en Catalunya más de 4.600 aves electrocutadas en la red eléctrica…Esto equivale a una media de más de una cada día. Losagentes rurales reconocen que esto es la punta del iceberg. Ellos al hallar el cadáver levantan acta y dan parte a la fiscalía de Medio Ambiente. Hay grandes cantidades de aves muertas en zonas protegidas como el delta del Ebro, Osona y alrededores, el macizo del Garraf, lugar de cría de varias rapaces. Y, sobre todo, en las comarcas del este de Catalunya que es donde se registran más muertes por choques y electrocuciones contra las líneas eléctricas”.
“Las aves que mueren en la red de alta tensión son habitualmente de gran envergadura, a menudo rapaces o carroñeras”.
Esto es un extracto de la noticia publicada el pasado 4 de junio en el Periódico de Catalunya y aunque se refiere solamente a Catalunya, sucede igualmente en toda España.
SEO-Birdlife viene denunciando estos hechos y poniéndolos en manos de la fiscalía y autoridades. Es un gran número de aves y de diversas especies, algunas incluidas entre las que están en peligro por la disminución de sus ejemplares, como la cigüeña blanca, el busardo ratonero, el águila culebrera, el azor y el búho real, entre otras. Y aves migratorias, águilas reales. Al desplegar sus alas tocan los cables y suelen recibir una descarga mortal.
En Catalunya Endesa dice que han introducido elementos de protección en algunos tendidos, pero también se aduce que es responsabilidad la Generalitat decidir la adecuación de los postes de los tendidos, así como las prioridades.
Es de alabar la acción de entidades como SEO-Birdlife, personas y entidades preocupándose por estos hechos y poniéndolos en manos de autoridades y fiscalía. Los animales afectados no pueden protestar, solo morir al posarse en esos cables. Pero es un claro atentado contra el medio y la fauna.
En cambio, he visto y oído quejarse a pretendidos científicos por el mal que hacen los gatos a los pájaros porque según ellos atentan contra la biodiversidad. Pero no he visto ni leído nada de estas personas sobre las muertes de esas aves y las causas, también claras que las provocan. Deploro, como otros muchos, esas actitudes, a todas luces interesadas, en unos casos por la incapacidad junto a la mala voluntad de enfocar el asunto con observaciones sesgadas y sin objetividad. En otros casos por el desinterés en buscar soluciones para proteger los tendidos eléctricos, una obligación para la protección del medio y de la fauna. Y ahí sí que, al no hacerlo, se atenta contra la biodiversidad